Proverbios capituló 7 - Reina Valera 1960Reina Valera 1960 audio - Proverbios capituló 7 mp3
Las artimañas de la ramera1. Hijo mío, guarda mis razones, Y atesora contigo mis mandamientos. 2. Guarda mis mandamientos y vivirás, Y mi ley como las niñas de tus ojos. 3. Lígalos a tus dedos; Escríbelos en la tabla de tu corazón. 4. Dí a la sabiduría: Tú eres mi hermana, Y a la inteligencia llama parienta; 5. Para que te guarden de la mujer ajena, Y de la extraña que ablanda sus palabras. 6. Porque mirando yo por la ventana de mi casa, Por mi celosía, 7. Vi entre los simples, Consideré entre los jóvenes, A un joven falto de entendimiento, 8. El cual pasaba por la calle, junto a la esquina, E iba camino a la casa de ella, 9. A la tarde del día, cuando ya oscurecía, En la oscuridad y tinieblas de la noche. 10. Cuando he aquí, una mujer le sale al encuentro, Con atavío de ramera y astuta de corazón. 11. Alborotadora y rencillosa, Sus pies no pueden estar en casa; 12. Unas veces está en la calle, otras veces en las plazas, Acechando por todas las esquinas. 13. Se asió de él, y le besó. Con semblante descarado le dijo: 14. Sacrificios de paz había prometido, Hoy he pagado mis votos; 15. Por tanto, he salido a encontrarte, Buscando diligentemente tu rostro, y te he hallado. 16. He adornado mi cama con colchas Recamadas con cordoncillo de Egipto; 17. He perfumado mi cámara Con mirra, áloes y canela. 18. Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana; Alegrémonos en amores. 19. Porque el marido no está en casa; Se ha ido a un largo viaje. 20. La bolsa de dinero llevó en su mano; El día señalado volverá a su casa. 21. Lo rindió con la suavidad de sus muchas palabras, Le obligó con la zalamería de sus labios. 22. Al punto se marchó tras ella, Como va el buey al degolladero, Y como el necio a las prisiones para ser castigado; 23. Como el ave que se apresura a la red, Y no sabe que es contra su vida, Hasta que la saeta traspasa su corazón. 24. Ahora pues, hijos, oídme, Y estad atentos a las razones de mi boca. 25. No se aparte tu corazón a sus caminos; No yerres en sus veredas. 26. Porque a muchos ha hecho caer heridos, Y aun los más fuertes han sido muertos por ella. 27. Camino al Seol es su casa, Que conduce a las cámaras de la muerte. |